Praza da Madalena
Su nombre proviene de una capilla ya desaparecida, propiedad del Conde de Amarante, en el lugar donde la plaza entronca con la del Trigo.
El lugar, antiguo mercado de frutas y verduras, antes de plaza fue cementerio, como nos recuerdan las lápidas medievales en un lateral, apoyadas en la Iglesia de Santa María Nai. Está centrada por un crucero barroco.
Llama la atención el uso como pavimento de cantos rodados, que se repite en varias plazas. Ello es debido a su abundancia en el sustrato orensano, lo que lo convirtió en el enlosado tradicional de Ourense, recuperado posteriormente ya en el siglo XX.